- Sasa, donde están Mis Tenacillas????????!!!!!!!!!!!!!!!
- En mi cuaaaaaaaaaarto.
La voz ha salido de la cocina.
- Tráemelas, por favor.
Respira. Lento. Hoy no te enfades, …
Hemos quedado en un restaurant nuevo que ha descubierto Lola (bien, otro síntoma de recuperación) y cenamos las cuatro, solas. Akelarre. Por fin. Sin niños, viernes.
Respira, seguro que viene … Sí, tarda, pero aguanta …
- Sasa, que HACES???????????!!!!!!!
- Ah!!! Voy, es que buscándolas he visto …
La voz se pierde en mi cabeza y mi hija aparece por la puerta del cuarto de baño. Me mira y parece que aprueba lo que ve. Normalmente critica sin piedad si piensa que enseño demasiado.
Cuando sale, desabrocho un botón más de la camisa blanca y me ajusto mejor los vaqueros.